Vaya, vaya, vaya. John Galliano abrió la caja de pandora hace unos meses en el mundo de la moda y parece que nadie es capaz de cerrarla. desde entonces son muchos los escándalos que acechan a este mundo que parecía ser un intocable: desde el despido del diseñador de Dior por unas declaraciones antisemitas, pasando por el despido de Decarnin en Balmain, las inumerables demandas de Christian Louboutin a distintas firmas entre ellas YSL... Y ahora les toca el turno a Azzedine Alaïa y Giorgio Armani.
El primero fue noticia la semana pasada por rechazar el puesto vacante de la firma francesa ya que considera que lo que le pasó a Galliano fue muy triste y por ese motivo no quería formar parte de ese capítulo. Al fin y al cabo parece que al que fuera diseñador de entonces de Dior todavía le quedan amigos. Pero no es la única declaración de Alaïa: se ha ido de la lengua y ha criticado a dos de los grandes, Karl Lagerfeld y Anna Wintour.
¿Quién recordará a Anna Wintour en la historia de la moda? Nadie. Así de tajante se ha mostrado el diseñador que además ha añadido que es muy buena como Relaciones Públicas y Negocios ya que asusta a la gente, pero que sólo con verla vestida ya demuestra que gustos tiene. Parece ser que el enfado le viene de años: Vogue USA nunca jamás muestra imágenes de la colección de Azzedine Alaïa. En lo que a Karl Lagerfeld se refiere, el diseñador declaró que el Kaiser nunca en la vida ha tocado unas tijeras.
No me gusta su moda, su espíritu, su actitud. Es demasiado caricatura. (...) Eso no quiere decir que no sea genial, pero es parte de otro sistema. Él tiene la capacidad. Un día hace fotografía, al siguiente hace la publicidad de Coca-Cola. Prefiero morir antes que ver mi cara en un anuncio de automóviles. Nosotros no hacemos el mismo trabajo.
Pero no es el único ‘grande‘ (y no lo decimos por su estatura, si no por sus trabajos) de la industria que se ha metido con otros ‘grandes‘. Giorgio Armani, ese que parecía ser de los más serios y simpáticos de este mundillo se ha metido con dos compañeros pátrios: Dolce & Gabbana y Prada. se despachó sin contemplación alguna y es que al parecer no le sentó muy bien la noticia de la salida de Prada a la Bolsa. Pero además se metió duramente con sus colecciones.
Miuccia Prada ha escogido la vía de la ironía, del mal gusto que se convierte en chic. Y en este filón son geniales, como lo son Dolce & Gabbana. Pero me fastidia que se les dé espacio en los periódicos.
Nos demuestran, una vez más, que entre compañeros no hay disciplina. ¡Una lástima!
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