Hace días nos abandonaba una de las figurás más míticas de la televisión de la década de los setenta,
Peter Falk, quien encarnó en la ficción durante casi una década al famoso y entrañable detective de voz rasgada
Colombo, fallecía a los 83 años de edad.
El actor que alcanzó la fama con este personaje dirigido por un joven de prometedor carrera, nada menos que
Steven Spielberg, no era un advenedizo en esta profesión ni mucho menos, aunque la fama para el gran público si que se debe al rol del despistadizo inspector, ya que con doce años se subió por primera vez a un escenario, aunque pasaron varios años hasta que empezara su carrera profesional, con 30 años ya cumplidos.
El reconocimiento de la crítica y el éxito vinieron a la par, la serie fue de lo más exitosa para la cadena
NBC, que cedió los derechos de emisión a varios países, pero además los profesionales del medio también la valoraron de manera muy positiva. Varios galardones entre los que se encuentran cinco Emmys, un globo de oro y multitud de nominaciones a estos y otros premisos televisivos. Hoy hacemos nuestro
pequeño homenaje a Peter Falk, que a pesar de no haber sido nunca ningún icono de estilo, al menos en mi caso personal ha sido todo un referente, y es que nadie como él ha sabido llevar tan bien una
clásica gabardina casi siempre
arrugada.
Raya diplomática más cigarillos, claves del estilo clásico seventies
No era alto, no era guapo, tampoco era feo, del mismo modo no se se puede decir que fuera de los más atractivos, pero tenía algo muy especial en su
mirada y
actitud, menester aparte de sus
aptitudes interpretativas. Es curioso pero su mirada tenía algo muy especial, y no lo digo por el ojo de cristal que llevaba en el lado derecho, que tuvo que extirpar por culpa de un tumor que lo dejó totalmente inutilizable, sino porque su mirada traspasaba fronteras más allá del objetivo de la cámara.
El
estilo del personaje Colombo se creó muy a conciencia, y es que el actor bajito, con algún kilito de más, tenía una gracia natural que había que explotar, a la contra que otros grandes detectives de la ficción mucho más estilosos y refinados (las comparaciones con Sherlock Holmes son odiosas sobre todo en este caso), poseía un aura diferente que nos encandiló a todos.
En la serie el personaje se vistió con el mismo decadente y decrépito
trench durante los ocho años de emisión y unos
cuantos trajes, no muchos ni muy diferentes la verdad, unas veces negro, otras gris o marrón y alguna ocasión azul y con
raya diplomática en celeste. La camisa blanca y corbata la mayoría de las veces lisas o con pocos ornamentos, más unos viejos y desgastados zapatos de horma clásica completaban su uniforme de trabajo más básico imposible.
Recrea el ‘Colombo look‘
Su pelo de
corte y peinado clásico a la vez que bastante despreocupado, que se fue volviendo canoso con el paso de las temporadas, un afeitado apurado muy apropiado para un teniente de la policia (que era su cargo exacto y no el de detective) puros y cigarrillos por doquier y una sonrisa entrañable conformaban las claves estilísticas de este anti-heroe que no por ello dejaba de resolver cualquier misterio, asesinato o crimen que se le pusiera por delante.
Homenajeando a Peter Falk y su entrañable personaje con el que tantas tardes calurosas de verano, y alguna que otra de invierno hemos tomado la merienda os animo a recrear el
‘Colombo look’ con esta selección de prendas, y aunque las temperaturas no acompañen, que sirva como referente para el próximo
Otoño-Invierno 2011/2012 porque
outfits clásicos, al igual que clásicos de la pantalla como el de hoy, nunca jamás pasarán de moda.
Trench en color camel de
J Crew (140€), Gabardina clásica en crudo de
Charles Tyrwhitt (200 €) y mítico
trench de
Burberry en Blanco roto (900€). Traje de lana fría gris de corte recto y americana de tres botones de
Mr Bathing Apple (350€), traje gris marengo clásico de
Richard James (500€) y conjunto de tres piezas negro con raya diplomática blanca de
Ralph Lauren Purple Label (3400€).