Dicen las malas lenguas que Steven Meisel no tiene ni idea de fotografía y que su trabajo consiste en explicar a su gran número de ayudantes cual es el concepto de la foto que quiere. Y cuando está todo preparado y a su gusto, simplemente se acerca a la cámara y aprieta el botón.
Quizás el origen de este rumor esté en una fugaz aparición suya en una película llamada “Portfolio“ que se estrenó en 1983 en la que se le ve dando saltos y gritos durante una sesión
Poco importa si este rumor es cierto o no. Meisel es hoy por hoy el mejor fotógrafo de moda del mundo y uno de los pocos que será recordado cuando pasen el tiempo y se hable de la fotografía de estos años.
Meisel “El misterioso”
Casi todo en la vida de este hombre es un puro misterio. Nacido en Nueva York en 1954, es realmente difícil encontrar fotografías suyas. Y en las que existen en prácticamente todas su look es el mismo: melena larga, bandana en la cabeza, gafas de sol, vaqueros, botas de motorista. No hay vídeos suyos trabajando. Casi no asiste a fiestas a pesar de ser amigo personal de Linda Evangelista, Anna Sui, Naomi Campbell o Madonna. Algo casi increíble en un fotógrafo con más de 30 años de exitosa carrera.
Curiosamente sus inicios en el mundo de la moda fueron como dibujante, aunque desde muy niño estaba fascinado con las fotografías que los grandes maestros como Irving Penn o Richard Avedon publicaban de modelos como Marisa Berenson o Veruschka (fotografías icónicas que le han servido más de una vez de inspiración para las suyas propias), y en algún momento llegó a perseguir a las súper modelos de principios de los 70 con su propia cámara como si fuese un paparazzi.
Vogue Italia
Aunque colabora habitualmente con Vogue USA y otras revistas como Vanity Fair o W, Vogue Italia es la revista con la que Meisel ha ligado su nombre para siempre. ¿La razón? Ser el autor de todas y cada una de las portadas de la revista desde agosto de 1988.
Meisel, que ya había trabajado con Franca Sozzani en la revista Lei antes de que fuese elegida como directora de Vogue Italia, y con su llegada comenzó una colaboración tan interesante como irrepetible, y que es un caso único en el mundo.
A través de estas portadas y los correspondientes editoriales es posible apreciar la absoluta libertad creativa que el fotógrafo tiene, su buen ojo para las modelos (se le considera el descubridor de muchas y caprichoso gusto puede hundir o reflotar una carrera) y su continua evolución, sin dejar de ser nunca fiel a si mismo.
Su versatilidad es casi perfecta y es capaz de crear un editorial genial sea cual sea el tema que lo ha inspirado: una película, un cuadro, o un fenómeno que revoluciona internet como twitter. Y es que si de algo no tiene miedo Meisel es de ofender o impactar y su inspiración puede venir de los ataques del 11-S, de las operaciones de cirugía estética, de las clínicas de rehabilitación o de las imágenes que ofrecen los informativos de la guerra de Irak.
En 2009 se publicó una recopilación de sus portadas para Vogue Italia que lleva por título “Three Hundred And Seventeen And Counting” y que puede comprarse pulsando aquí, pero dónde realmente se disfruta de su talento es teniendo una de estas revistas en la mano.
Campañas
Los diseñadores no son ajenos a su talento y temporada tras temporada se convierte en el fotógrafo que más campañas acumula. El listado de marcas con las que ha trabajado es tan extenso que probablemente acabaríamos antes nombrando a las que no han contado con su cámara que a las que sí lo han hecho.
Y al igual que ocurre con Vogue Italia, en la publicidad también hay una marca que sólo confía en el para sus campañas desde 2004: Prada.
Para mí sería casi imposible hacer una selección de mis campañas favoritas ya que son demasiadas. Así que una buena forma de repasar algunas de ellas es seleccionar las fotos con lo que yo llamo la “postura Meisel” en la que la modelo o modelos están tumbados en el suelo o sobre un sofá como una marioneta a la que le hubiesen cortado las cuerdas.
En un mundo como el de la moda, en el que casi todo se ha visto ya antes millones de veces, todavía es posible tener un sello propio.
Sex
La colaboración de Meisel y Madonna comienza en 1983 con la portada de “Like a Virgin” y ha continuado durante estos casi 30 años, pero hay un hito en la carrera de ambos que no podemos pasar por alto: la publicación en 1992 de Sex, un libro de fotografías eróticas protagonizado por la cantante como complemento a la edición de su disco “Erotica“ y cuya realización y publicación pasó por tal cantidad de escándalos y problemas (algunas fotos fueron robadas y tuvo que intervenir el FBI para recuperarlas), que lo ha convertido en uno de los objetos más codiciados por los fans de ambos.
CORTESIA DE TRENDENCIAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario